Con un árbol de 80 años promedio de edad existente en el sitio y 18 metros de diámetro como copa. El Álamo es un proyecto que se desarrolla a partir de su cubierta natural, convirtiendo su tronco como el epicentro funcional de todos los espacios contenidos en construcción.

El proyecto se pensó como un refugio a partir de la pandemia de Covid 19, para brindar una arquitectura integrada con el entorno natural, sostenible y estéticamente armonioso que captura la sombra, la frescura y la serenidad de su copa, creando un lugar pensado para el descanso y la contemplación.

La obra incluye dos recámaras, una de ellas con baño vestidor, una cocina cerrada, una terraza con cocina al aire libre y unmedio baño exterior. Cada espacio se organiza cuidadosamente para que el álamo sea visible desde cualquier punto, mientras que los jardines ocupan los vacíos de la construcción, conectando los interiores con el exterior de manera fluida. 

El acceso principal está definido por una puerta de 4 metros de altura, acompañada de un muro de gavión relleno con piedra bola, que filtra la luz del poniente y modula los vientos dominantes. Las fachadas sur y poniente están protegidas con muros dobles de block que reducen la transmisión térmica. Los ventanales, orientados al norte y al este, aprovechan al máximo la luz natural, reduciendo el consumo energético y generando una continuidad visual entre los espacios interiores y el paisaje exterior. 

Nombre completo del proyecto: El Alamo
Autor de la obra: Arq. Raúl Diego Cervantes      
Terreno: 18m Frente x 20 m Largo   
Superficie construida: 91 m2
Año de proyecto: 2023
Fotografía: Diego Cervantes
Tipología: Casa Habitación/Privada
Ubicación: Casa Blanca, Guasave, Sinaloa.